Se puede llegar a ser un emprendedor exitoso en solitario, pero te aseguro que no hay nada que se pueda comparar con la sensación de seguridad en el triunfo que interiorizas cuando formas parte de un equipo ganador.
Cuando hablamos de la importancia del equipo en este caso me estoy refiriendo al que forman los promotores del proyecto, los socios. En otro contexto, se puede estar incluyendo a los colaboradores externos, pero no es el caso.
Cuando decides emprender, la importancia del equipo que desarrolla el proyecto resulta un factor vital. Como dijo Ed Catmull, presidente en Pixar:
«Si le das una buena idea a un equipo mediocre, va a meter la pata. Si le das una idea mediocre a un equipo brillante, la arreglarán o la tirarán a la basura y crearán algo mejor» Ed Catmull
Así que, no te rodees de cualquiera. Esto no va de amigos. Si lo son, mucho mejor, es muy bonito trabajar con buenos amigos, pero lo realmente importante es que el equipo tenga armonía. Analiza los siguientes puntos a la hora de componer un equipo con posibilidades, porque estas deberían ser cualidades de un equipo emprendedor ganador:
1. Actitud emprendedora
Todos los componentes del equipo deben estar dispuestos a darlo todo por la causa. A veces, el sentirse “dueño de la empresa” a algunas personas les hace ver los derechos, pero no así las obligaciones. Si hay gente con pocas ganas de trabajar, pronto contagiarán a los demás, o éstos se enfadarán, generando mal ambiente. Si el ambiente es malo, poco vamos a disfrutar. Todos los miembros del equipo deben estar dispuestos a ofrecer un alto nivel de esfuerzo.
2. Pensamiento Positivo
No es un camino fácil y a veces te dan bajones o te entran las dudas. No hay que dejarse desanimar a las primeras de cambio. Muchos de los que se han rendido nunca sabrán que estaban a punto de conseguirlo. Un equipo positivo se anima entre sí, los unos ayudan a los otros a superar los momentos de desánimo. Ojo, ser positivo no significa cerrar los ojos ante los problemas, significa encararlos con espíritu ganador. Porque, como decía Henry Ford, el presidente de la legendaria compañía automovilística:
“Tanto si crees que puedes hacerlo como si crees que no puedes, en ambos casos estás en lo cierto” Henry Ford
3. Buena Capacitación Técnica
Debemos aspirar a ser los mejores y para ello hay que trazar un plan de capacitación técnica a nivel formativo. Debemos buscar nuestras debilidades y tomar medidas para convertirlas en fortalezas. La formación siempre debe ocupar una parte de nuestro tiempo.
4. Un Estilo de Trabajo Común
Si pones junto a una persona organizada y cuidadosa a otra chapucera o desorganizada, tienes una situación explosiva. No puede funcionar. Debéis fijar todos juntos unas normas de trabajo, unos métodos organizativos y unos procedimientos de gestión. Entre otras muchas cosas, eso os ayudará a solapar vuestras actividades, os ayudará a crecer cuando tengáis que incorporar a nuevos miembros a vuestro equipo y sobre todo, os dará la posibilidad de ofrecer calidad a vuestros clientes. Si vuestra forma de trabajar es una calamidad, el resultado será similar.
Un equipo de emprendedores ganador debe tener un estilo de trabajo común. Normalmente cada cual tiene su propia manera de trabajar, en la que confía. Por eso, para conseguir esa armonía, ese estilo común, juntos deberéis fijar y respetar vuestras propias normas, métodos y procedimientos de gestión.
5. Unos Valores Compartidos
Si tenéis los mismos valores os comprenderéis mejor entre vosotros y eso os ayudará en el trato con terceros, sean clientes, proveedores… Este concepto es algo abstracto, ciertamente, pero compartir valores ayuda en muchos aspectos.
Obviamente, a un colaborador externo no se le puede exigir lo mismo que a los promotores (socios), pero cuanto más en sintonía estén con la filosofía y forma de trabajo del equipo promotor, mejor se integrarán y mejor funcionarán las cosas.
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